La próxima cumbre climática busca aumentar seis veces la capacidad global de almacenamiento de energía en los próximos seis años, alineándose con los compromisos internacionales de energía renovable.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29), que se celebrará en Bakú, Azerbaiyán, del 11 al 22 de noviembre de 2024, podría adoptar un ambicioso objetivo global: alcanzar 1,5 teravatios (TW) de capacidad de almacenamiento de energía para el año 2030. Este compromiso significaría un incremento de más de seis veces la capacidad actual, lo que requeriría la adición de más de 158 gigavatios (GW) anuales.
El borrador de la propuesta, conocido como Global Green Energy Storage Pledge, está alineado con el acuerdo firmado por el G-7 en abril de este año. Dicho acuerdo tiene como meta alcanzar 1.500 GW de capacidad de almacenamiento de energía al final de la década, una cifra considerablemente superior a los 230 GW registrados en 2022.
El G-7 propuso este compromiso con el objetivo de apoyar la meta global de la COP28 de triplicar la capacidad de energía renovable para 2030. Al mismo tiempo, se busca transformar las energías renovables intermitentes en una fuente confiable de energía de base. Para cumplir esta meta, se necesitaría un despliegue significativo de almacenamiento de energía, particularmente a través de baterías, que según la Agencia Internacional de Energía (AIE), debe aumentar seis veces.
Un informe reciente de la AIE destaca que la capacidad global de almacenamiento de energía en baterías debe alcanzar los 1.200 GW para 2030, de un total de 1.500 GW en sistemas de almacenamiento. El informe advierte que no lograr este objetivo podría frenar la transición hacia un sistema energético limpio y confiable.
En 2023, el almacenamiento en baterías superó en crecimiento a otras tecnologías de energías limpias, aumentando un 130% interanual y añadiendo 42 GW de capacidad al sector eléctrico mundial. Además, la hidroeléctrica de bombeo alcanzó 181 GW de capacidad instalada el mismo año. Según BNEF, en 2024 el mercado de almacenamiento estacionario creció un 61%, con precios que han caído un 43% en comparación con 2023, y un 90% respecto a los de hace 15 años.
A pesar de los avances, la propuesta de la COP29 también busca fomentar la investigación en nuevos tipos de almacenamiento de baterías y promover estándares de reciclaje que faciliten la reutilización al final de su vida útil.