La producción de energía solar fotovoltaica crece un 19% en un año, consolidando a España como líder en energías renovables.
A falta de tres meses para finalizar 2024, España ha alcanzado un nuevo hito en la producción de energía solar, superando su récord anterior. Según datos de la Red Eléctrica de España (REE), el país ha generado 37.551 GWh de energía solar fotovoltaica, superando los 37.472 GWh alcanzados en todo 2023. Este logro supone un incremento del 19% en la producción de energía solar respecto al año pasado, marcando un avance significativo en la transición hacia fuentes de energía más sostenibles.
Durante este año, la energía fotovoltaica ha alcanzado otro récord mensual en julio, cuando se generaron 5.817 GWh. Actualmente, la energía solar representa el 18,3% del total de electricidad generada en España, consolidándose como la tercera fuente más importante en el mix energético nacional. Este crecimiento, combinado con la energía eólica, ha permitido que el 57,5% de la electricidad producida en lo que va de 2024 provenga de fuentes renovables.
El éxito de la energía solar se debe a una combinación de condiciones meteorológicas favorables y el incremento en la capacidad fotovoltaica instalada. Sin embargo, en momentos de alta demanda, como durante las olas de calor, aún es necesario recurrir a ciclos combinados para cubrir el hueco térmico. A pesar de esto, España sigue reduciendo su dependencia de los combustibles fósiles gracias a un mix energético más equilibrado.
España, potencia solar en Europa
En el contexto europeo, España se ha consolidado como una de las principales potencias renovables, destacando especialmente en energía solar fotovoltaica. Con una capacidad instalada de 29,5 GW, solo es superada por Alemania en este ámbito. Además, el país cuenta con más de 106,1 GW de proyectos solares a gran escala en fase de preconstrucción, lo que augura un futuro aún más prometedor para la energía renovable en el país.
Con estos avances, España sigue posicionándose como un referente en la lucha contra el cambio climático y la adopción de tecnologías energéticas limpias.